En 1883 la situación política en
la República del Ecuador era bastante álgida, varios sectores se habían alzado
contra el gobernante general Ignacio de Veintemilla y éste, se había hecho
fuerte en Guayaquil.
Las montoneras de Eloy Alfaro en
el norte de la Costa, el general José María Sarasti en la Serranía y finalmente
tropas de la provincia de El Oro habían acorralado al gobierno y habían
impuesto un bloqueo terrestre a Guayaquil a partir de abril.
El baño de sangre se evitó ya que
el gobernante abandonó la ciudad el 9 de julio embarcándose en el vapor Santa
Lucía, dejando a las facciones mencionadas que constituyan el nuevo gobierno.
Esta coyuntura trajo como
consecuencia que, durante el bloqueo de la ciudad, esta no podía ser provista de
especies postales, lo que rápidamente originó que los sellos de mayor uso
rápidamente se agotaran.
En el Ecuador circulaban los
primeros sellos postales denominados en moneda decimal (1, 2, 5, 10, 20 y 50
centavos de sucre) y las tarifas vigentes implicaban que los valores de 5 y 10
centavos fueran los de mayor uso.
Ante la escasez de estos sellos,
inicialmente se bisectaron los de 20 centavos usando cada mitad como 10
centavos y, posteriormente se hizo una sobrecarga local que dice DIEZ CENTAVOS
en dos líneas sobre el sello de 50 centavos.
Falsificaciones abundan de esta
sobrecarga y las originales se distinguen por el papel blanco del sello de 50
centavos (primer tiraje) y por la base de la letra V de la sobrecarga que
usualmente tiene una base plana.
Esta sobrecarga es la primera
realizada en el país y, también el primer sello local del país, es sumamente
raro encontrarla en sobres postales o fragmentos.
Eco. Pablo Pérez
No hay comentarios:
Publicar un comentario